Si acabas de sufrir una rotura del ligamento cruzado anterior (LCA) de rodilla y tu objetivo es volver a jugar al fútbol después de LCA al mismo nivel de competencia, necesitas entender que tu recuperación no es únicamente un proceso quirúrgico o fisioterapéutico aislado.
Tu retorno al juego depende de tres pilares fundamentales: la cirugía adecuada (si es tu caso), una rehabilitación estructurada y científica, y un entrenamiento funcional específico del fútbol.
Este artículo te proporciona un marco completo y basado en evidencia para navegar cada fase de tu recuperación, desde el diagnóstico inicial hasta tu reinserción competitiva.
Entendiendo la lesión de LCA: Anatomía y mecanismo de lesión en el Fútbol
Antes de hablar sobre tu retorno al juego, es crucial que entiendas qué es exactamente lo que se ha dañado en tu rodilla y por qué es tan importante rehabilitarlo correctamente.
¿Qué es el Ligamento Cruzado Anterior?
El LCA es una estructura fibrocartilaginosa de aproximadamente 38 mm de largo ubicada dentro de la articulación de la rodilla. Su función principal es prevenir la traslación anterior (desplazamiento hacia adelante) de la tibia respecto al fémur, además de contribuir al control rotacional y la estabilidad general de la rodilla durante movimientos dinámicos.
En términos funcionales, el LCA es especialmente crítico durante el fútbol porque:
- Estabiliza la rodilla durante cambios de dirección: Cuando ejecutas un regate o cambio de ritmo, tu LCA actúa como estructura principal que evita que tu tibia se desplace.
- Proporciona control propioceptivo: Contiene mecanorreceptores que envían información al sistema nervioso sobre la posición de tu rodilla en el espacio. Este feedback es esencial para la toma de decisiones rápidas en el terreno.
- Distribuye cargas: Trabaja en conjunto con los meniscos, cápsula articular y musculatura periarticular para absorber y distribuir las fuerzas generadas durante el movimiento.
Mecanismos de lesión típicos en futbolistas
Aproximadamente el 70-80% de las lesiones de LCA en fútbol ocurren sin contacto directo. Los mecanismos más comunes son:
- «Plant and Cut» (Planta y Giro): Fijar el pie en el suelo con rodilla en ligera flexión y realizar un giro rápido del tronco y cadera. Este es probablemente el más frecuente en defensa.
- Aterrizaje deficiente: Saltar para un cabezazo y aterrizar con la rodilla en extensión completa o con valgo (rodilla hacia adentro), generando excesiva carga de flexión y rotación.
- Desaceleración rápida: Reducir velocidad súbitamente con carga corporal concentrada en una sola pierna.
- Flexión forzada con rotación: Movimientos donde tu rodilla está flexionada y se produce una rotación interna de tibia o rotación externa de fémur.
Entender estos mecanismos es importante porque tu protocolo de recuperación debe específicamente entrenar la resistencia a estas cargas.
Diagnóstico y decisiones iniciales: ¿Cirugía o Tratamiento Conservador?
Aquí comienza tu primer dilema crítico. No todos los futbolistas con rotura de LCA requieren intervención quirúrgica inmediata, aunque la mayoría que desean competir a nivel deportivo sí la necesitarán.
Criterios para considerar Tratamiento Conservador
El manejo conservador (sin cirugía) puede ser viable si:
- La rotura es parcial o de bajo grado (evaluado por resonancia magnética).
- Tu rodilla no presenta inestabilidad funcional significativa (tu rodilla no «cede» durante movimientos).
- Tu edad es menor a 25 años o mayor a 40 años con demandas deportivas bajas.
- Estás dispuesto a modificar tu patrón de juego (menos cambios de dirección bruscos, menos defensas de alto riesgo).
- Tienes acceso a un programa de fisioterapia de excelencia durante mínimo 6-9 meses.
Realidad importante: Solo entre el 50-65% de futbolistas con manejo conservador retornan al mismo nivel competitivo.
Si eres futbolista amateur o semiprofesional y tu objetivo es competir seriamente, la cirugía generalmente ofrece mejores perspectivas.
La Reconstrucción Quirúrgica de LCA: opciones de injertos
Si optas por cirugía (la opción más recomendada para futbolistas competitivos), tu cirujano elegirá entre dos tipos principales de autoinjertos:
1. Tendón Patelar (HTH – Hueso-Tendón-Hueso)
- Ventajas: Mayor rigidez biomecánica, excelente integración ósea, menor tiempo de maduración del injerto.
- Desventajas: Morbilidad en la zona donadora (puede afectar saltos y extensión de rodilla), dolor anterior de rodilla más frecuente.
- Mejor para: Deportes de máxima explosividad y contacto (rugby, fútbol defensivo agresivo).
2. Isquiotibiales (ST-G – Semitendinoso/Gráciles cuádruple)
- Ventajas: Menor morbilidad en zona donadora, excelente para deportes con muchas rotaciones, recuperación más cómoda inicialmente.
- Desventajas: Mayor laxitud inicial, más tiempo de maduración (hasta 12 meses), más frecuencia de desgarros musculares en zona donadora si no se rehabilita correctamente.
- Mejor para: Futbolistas con antecedentes de problemas patelares, jugadores con demanda alta de cambios de dirección.
La tasa de éxito en recuperación es similar entre ambas opciones (94-97%) si se sigue un protocolo riguroso.
Fases de Rehabilitación Post-Operatoria para volver a jugar al fútbol después de LCA
Tu rehabilitación se divide en cuatro fases interconectadas. Conocer exactamente en qué fase estás y qué objetivos debes alcanzar es crucial para tu progresión segura.
FASE 1 – Rehabilitación Inicial (Semanas 0-6)
Objetivo principal: Recuperar movilidad, reducir inflamación, comenzar reactivación neuromuscular.
Criterios de entrada: Recién operado.
Criterios de salida:
- Extensión completa sin derrame
- Flexión ≥90°
- Ausencia de signos de inflamación articular
- Cuádriceps iniciando contracción voluntaria
Actividades permitidas:
- Movilización activo-asistida desde el día 0-2 con rodillo de movimiento pasivo continuo (CPM).
- Marcha con muletas con descarga progresiva (días 3-7: descarga parcial; semana 2: 50% peso; semana 4: 75%; semana 6: sin ayuda).
- Ejercicios isométricos de cuádriceps con biofeedback (pelota bajo rodilla).
- Movilización de tobillo y cadera.
- Crítico: Controlar inflamación con hielo, compresión y elevación. En esta fase, el injerto soporta solo el 15% de su máxima capacidad de tensión (~400 Newtons). La marcha genera aproximadamente 300 N, por lo que es segura.
Ejercicios clave:
- Contracción isométrica de cuádriceps (3 series x 10 reps, 5 segundos de mantención).
- Extensiones de cadera en decúbito prono.
- Flexión activa de rodilla en posición supina (rango libre).
- Equilibrio en bipedestación con apoyo (barra).
FASE 2 – Rehabilitación Acelerada (Semanas 6-16)
Objetivo principal: Restaurar amplitud de movimiento completa, iniciar fortalecimiento muscular progresivo, entrenar control propioceptivo básico.
Criterios de entrada:
- Extensión completa sin deformidad
- Flexión ≥110°
- Ausencia de efusión articular
- Marcha normal sin cojera
Criterios de salida:
- Amplitud de movimiento completa y simétrica
- Fuerza de cuádriceps ≥70% de la pierna sana (evaluado en isocinesia)
- Control propioceptivo básico en bipedestación
- Inicio de carrera en línea recta sin dolor
Actividades permitidas:
- Fortalecimiento en cadena cerrada (ideales en esta fase por menor tensión en LCA): sentadillas progresivas, prensa de piernas, step-ups.
- Fortalecimiento selectivo: trabajo de isquiotibiales en máquina de flexión sentado (es seguro; la flexión en cadena abierta genera traslación posterior de tibia, protegiendo el injerto).
- Propiocepción en plataforma estable: bipedestación con ojos cerrados, alcances laterales.
- Movilidad articular activa asistida.
- Caminata con cambios suaves de ritmo.
Progresión semanal aproximada:
- Semana 6-8: Sentadillas del 50%, 2×12 reps.
- Semana 8-10: Sentadillas del 70%, 3×10 reps; prensa de piernas 50%, 3×12 reps.
- Semana 10-14: Aumentar a 80%, introducir sentadilla búlgara unilateral (pierna sana); prensa 70%, 3×8.
- Semana 14-16: Sentadilla unilateral controlada (asistida), mini lunges.
Por qué cadena cerrada: En ejercicios de cadena cerrada (pie fijo), los isquiotibiales se activan más para controlar la traslación anterior de tibia generada por el cuádriceps, reduciendo la carga directa sobre el injerto.
A los 3 meses postoperatorio, tu injerto soporta aproximadamente el 50% de su resistencia máxima, lo que permite progresiones seguras.
FASE 3 – Entrenamiento Funcional General (Meses 4-7)
Objetivo principal: Recuperar fuerza máxima, introducir movimientos dinámicos, entrenar control neuromuscular específico de deportista.
Criterios de entrada:
- Fuerza de cuádriceps ≥70%
- Amplitud de movimiento completa y sin dolor
- Capacidad de caminar 30+ minutos sin molestias
Criterios de salida:
- Fuerza isocinética cuádriceps/isquiotibiales ≥90% simetría (diferencia <10%)
- Test de salto simple monopodal ≥85% simetría
- Ausencia total de dolor articular
- Control propioceptivo dinámico
Actividades permitidas:
- Fortalecimiento en máxima potencia: Sentadilla con carga 80-90%, series de 3-5 reps; prensa de piernas explosiva; levantamientos olímpicos simplificados (sin excesiva rotación).
- Trabajo de isquiotibiales: Flexión sentado, peso muerto rumano (excelente para futbol), puente con cadera elevada.
- Trabajo de cadera: Abducción/aducción en máquina, hip thrusts, escalada lateral con banda elástica.
- Propiocepción dinámica: Plataforma inestable (BOSU, tabla de equilibrio), lanzamientos contra pared con un pie, giros controlados en apoyo.
- Inicio de carrera: Carrera en línea recta a intensidad submáxima, 10-15 minutos.
- Entrenamiento de velocidad: Series de aceleración 30-50 metros a 80-90% intensidad.
Ejemplo de sesión de entrenamiento (Mes 5):
- Calentamiento: 5 min ciclismo, movilidad dinámica 5 min.
- Sentadilla: 4×6 al 85% RM.
- Peso muerto rumano: 3×8.
- Step-up unilateral: 3×8 cada pierna.
- Propiocepción: BOSU, 3×30 seg cada pierna.
- Carrera: 15 min a ritmo controlado.
- Trabajo de velocidad: 4x50m a 80%.
- Enfriamiento: 5 min caminata, estiramientos.
A los 5 meses post-operatorio, tu injerto ha alcanzado aproximadamente el 80% de su resistencia tensil original. Esta es tu ventana para intensificar progresivamente el trabajo funcional.
FASE 4 – Entrenamiento Específico del Fútbol y Retorno Progresivo al Juego (Meses 7-12)
Objetivo principal: Entrenar gestos técnicos de fútbol con carga progresiva, recuperar confianza emocional, validar readiness mediante tests objetivos.
Criterios de entrada:
- Fuerza isocinética ≥85% simetría
- Test de salto ≥90% simetría
- Carrera sin dolor a máxima intensidad
Criterios de entrada a entrenamiento con pelota:
- Todos los anteriores cumplidos
- Evaluación psicológica ACL-RSI >70 puntos
- Aprobación del equipo médico multidisciplinario
Progresión de retorno al juego:
Semana 1-2: Entrenamiento individual con pelota (controles, pases suave, tiro a portería estática).
Semana 3-4: Entrenamiento en grupo reducido (5v5, pases, pequeños espacios, sin contacto).
Semana 5-6: Entrenamiento completo sin contacto; introducir cambios de dirección progresivos, giros, aceleración.
Semana 7-8: Entrenamiento de contacto limitado; duelos 1v1, pequeños partidos 7v7 con descansos frecuentes.
Semana 9-10: Duelos completos en entrenamientos, minutos progresivos en partidos (15 min → 30 min → 45 min).
Semana 11-12: Retorno a competición si cumple todos los criterios.
Entrenamiento específico en esta fase:
- Cambios de dirección en zig-zag: 4 series x 2 repeticiones, aumentando velocidad progresivamente.
- Trabajo de aceleración/desaceleración: Carreras de 20m con parada completa.
- Saltos y cabeceos: Iniciar con cabeceos estáticos, progresando a dinámicos con movimiento.
- Finalizaciones: Tiro desde diferentes ángulos con giro previo.
- Defensa reactiva: Movimientos defensivos contra atacantes en espacios reducidos.
Criterios objetivos para volver a jugar al fútbol después de LCA
Este es quizás el aspecto más crítico y frecuentemente ignorado. Muchos futbolistas regresan «sintiéndose bien» y sufren re-lesiones. Tu retorno debe estar respaldado por evaluaciones objetivas.
Evaluación Isocinética de Rodilla
La dinamometría isocinética mide la fuerza máxima de extensores (cuádriceps) y flexores (isquiotibiales) de tu rodilla a velocidades controladas (típicamente a 60°/seg en concéntrico y excéntrico, y 300°/seg para velocidad de juego).
Criterios de aprobación:
- Limb Symmetry Index (LSI) cuádriceps ≥90% (máximo 10% de diferencia entre pierna operada y sana).
- Ratio flexores/extensores ≥0,65 (es decir, tus isquiotibiales deben tener al menos el 65% de la fuerza del cuádriceps; esto es protección contra el LCA).
- Índice de flexores en concéntrico/excéntrico evaluando si hay déficits neuromusculares.
Interpretación práctica: Si tu LSI es del 85%, significa que aún tienes un 15% de déficit de fuerza. Este déficit se amplifica bajo fatiga, por lo que tu riesgo de re-lesión es significativamente mayor.
Hop Tests (Pruebas de Salto Funcionales)
Los hop tests evalúan cómo tu rodilla se comporta bajo carga dinámica y explosiva, que es mucho más específico al fútbol que la isocinesia.
Test de Salto Simple Monopodal (Single Hop for Distance):
- Parado en una pierna, salta lo más lejos posible y mide la distancia.
- Se realiza dos veces en cada pierna.
- Calcula simetría: (distancia pierna operada / distancia pierna sana) x 100.
Test de Triple Salto Monopodal (Triple Hop for Distance):
- Tres saltos consecutivos en una pierna.
- Más exigente que el simple; simula mejor la demanda del fútbol.
Test de Salto Cruzado (Crossover Hop):
- Salta lateralmente sobre una línea 3 veces y mide distancia total.
- Evalúa control rotacional y estabilidad lateral.
Test de Salto Cronometrado (Timed 6-Meter Hop):
- Corre 6 metros saltando en una pierna lo más rápido posible.
- Mide velocidad y potencia.
Criterio de aprobación general: LSI ≥90% en todos los tests. Si alguno está entre 85-90%, requiere entrenamiento adicional antes de competir.
Dato crítico: Estudios recientes demuestran que los futbolistas que completan el salto simple monopodal con simetría <90% tienen 2.5x más riesgo de re-lesión ACL.
Resonancia Magnética de Control
Tu MRI postoperatoria debe mostrar:
- Patrón biológico de maduración del injerto completo: El injerto debe verse continuo, homogéneo e isointenso (similar en color/intensidad a ligamentos normales).
- Ausencia de edema alrededor del túnel óseo.
- Posición correcta del injerto sin torsión.
- Integridad meniscal y cartilaginosa sin nuevas lesiones.
La MRI es especialmente importante porque el injerto continúa madurando hasta los 12 meses postoperatorio. Algunos protocolos conservadores incluso recomiendan esperar evaluación MRI confirmando maduración total antes de retorno al juego competitivo.
Evaluación Psicológica para volver a jugar al fútbol después de LCA: ACL-RSI (ACL Return to Sport after Injury)
Este score, frecuentemente ignorado, es proféticamente predictivo de tu retorno exitoso.
El cuestionario ACL-RSI consta de 12 preguntas sobre:
- Confianza en tu rodilla
- Miedo a re-lesionarte
- Capacidad percibida de retorno al deporte
Cada pregunta se puntúa 0-100, y el score final es el promedio.
Interpretación:
- >70 puntos: Excelente predisposición psicológica.
- 56-70 puntos: Moderada; requiere trabajo psicológico adicional.
- <56 puntos: Déficit psicológico significativo; alto riesgo de no retorno o re-lesión.
Dato impactante: De los futbolistas que alcanzaban todos los criterios físicos pero tenían ACL-RSI <70, solo el 16.7% mantuvo su nivel deportivo a largo plazo.
Volver a jugar al fútbol después de LCA sin recaídas
La primera lesión de LCA es traumática y frecuentemente «mala suerte». La re-lesión es culpa tuya si no implementas estrategias preventivas.
Entrenamiento Neuromuscular Preventivo Permanente
No puedes «retirarte» de los ejercicios preventivos después de volver a jugar. Tu protocolo competitivo debe incluir indefinidamente:
- 2-3 sesiones semanales de fortalecimiento: Especialmente cuádriceps, isquiotibiales y glúteo medio (este último previene valgo de rodilla, mecanismo de lesión común).
- Propiocepción dinámica: Entrenamiento en superficies inestables, mínimo 2x/semana.
- Trabajo de velocidad y agilidad: Cambios de dirección controlados, aceleraciones/desaceleraciones con énfasis en técnica.
Técnica de Aterrizaje Segura
Entrena conscientemente la biomecánica defensiva:
- Aterriza con rodilla flexionada (20-30° de flexión mínimo), nunca en extensión completa.
- Proyecta tu peso hacia talones, no puntas.
- Mantén alineación rodilla-tobillo: Evita valgo (rodilla hacia adentro).
- Activa glúteo medio: Distributes cargas más uniformemente.
Este es un trabajo técnico permanente, no solo rehabilitador.
Manejo de Fatiga y Carga
El riesgo de lesión aumenta exponencialmente cuando estás fatigado. Estrategias:
- Monitoriza tu carga interna: RPE (Rate of Perceived Exertion), HRV (Heart Rate Variability), o apps como Stryd.
- Respeta los períodos de descanso: Descarga en temporada baja es crítico.
- Comunicación con tu preparador físico: Aumenta carga progresivamente; no saltes etapas.
Diferencias a tener en cuenta al volver a jugar al fútbol tras LCA: Retorno Conservador vs. Post-Quirúrgico
Aunque ambos caminos pueden llevarte a jugar fútbol nuevamente, tienen consideraciones distintas.
Manejo Conservador de LCA
Ventajas:
- Sin morbilidad quirúrgica.
- Potencial retorno más rápido (6-9 meses en algunos casos).
- Menos dolor postoperatorio.
Desventajas:
- Mayor riesgo de osteoartritis a largo plazo (rodilla inestable).
- Menores tasas de retorno al mismo nivel (50-65% vs 90%+ en quirúrgico).
- Requiere adaptación permanente de estilo de juego.
- Mayor riesgo de lesiones meniscales secundarias.
Protocolo de conservador:
- Fisioterapia intensiva: 3-4 sesiones/semana durante 3 meses, luego mantenimiento.
- Énfasis aún mayor en fortalecimiento preventivo permanente.
- Puede no permitirte volver a defensa de contacto elevado o posiciones de máxima demanda rotatoria.
Post-Quirúrgico (Reconstrucción LCA)
Ventajas:
- Mayor estabilidad articular permanente.
- Tasas de retorno al mismo nivel mucho más altas.
- Mejor perspectiva a largo plazo de articulación sana.
Desventajas:
- Recuperación más larga (9-12 meses tipicamente).
- Riesgo quirúrgico (aunque bajo).
- Morbilidad de zona donadora (especialmente tendón patelar).
La decisión debe ser personalizada según tu edad, nivel de juego, expectativas y preferencias personales. Idealmente, tu cirujano y fisioterapeuta colaboran en esta decisión.
Resumen Práctico para Volver a jugar al fútbol después de LCA
Te recomiendo poner el móvil en horizontal para poder verlo al completo
| Fase | Tiempo aprox. | Objetivo Principal | Criterio de Salida |
|---|---|---|---|
| Fase 1: Inicial | Semanas 0-6 | Movilidad + reducción inflamación | Ext. completa, Flex. ≥90°, sin derrame |
| Fase 2: Acelerada | Semanas 6-16 | Fortalecimiento + propiocepción básica | Fuerza cuádriceps ≥70%, ROM completo |
| Fase 3: Funcional | Meses 4-7 | Fuerza máxima + control neuromuscular | LSI ≥90%, Hop test ≥85%, sin dolor |
| Fase 4: Fútbol | Meses 7-12 | Retorno progresivo a juego | Todos criterios + ACL-RSI >70 + aprobación médica |
Acciones clave para tu éxito:
- Elige cirugía si tu objetivo es competir seriamente (tasas de éxito significativamente superiores).
- Cumple TODOS los criterios de evaluación antes de retornar: No negocias isocinesia, hop tests o MRI.
- Entrenar específicamente para fútbol desde mes 7: No solo rehabilitación genérica.
- Mantén fortalecimiento preventivo indefinidamente: Tu carrera deportiva depende de ello.
- Trabaja aspecto psicológico: ACL-RSI es tan importante como fuerza.
- Comunicación constante con tu equipo médico: Cirujano, fisioterapeuta, preparador físico y psicólogo.
Tu retorno al fútbol después de una lesión de LCA es posible y muy probable. Pero será seguro y exitoso solo si respetas el proceso científico, no tomas atajos, y entiende que la recuperación es un maratón, no una carrera de 100 metros.
Consultas habituales sobre volver a jugar al fútbol después de LCA
¿Puedo volver a jugar al fútbol después de LCA al mismo nivel que antes?
Sí, pero con matices. Los datos muestran que 94-97% de futbolistas operados retornan a jugar, pero solo 65-75% lo hacen al mismo nivel competitivo a largo plazo (5+ años).
Los que cumplen estrictamente todos los criterios de alta alcanzan tasas del 94% de retorno al mismo nivel.
¿Cuántos meses son realistas para volver a jugar al fútbol después de LCA?
- Manejo conservador: 6-9 meses para retorno deportivo básico; 12-15 para competición.
- Post-quirúrgico: 9-12 meses típicamente. Algunos atletas «aceleran» a 7-8 meses, pero el riesgo de re-lesión aumenta si no cumplen criterios.
¿Seré más propenso a artrosis de rodilla?
Después de una rotura de LCA (manejada conservadoramente o quirúrgicamente), existe riesgo aumentado de osteoartritis a largo plazo.
Estudios de 10-20 años muestran que 25-50% de pacientes desarrollan cambios degenerativos. Sin embargo, este riesgo se reduce significativamente si:
- Realizas operación tempranamente (dentro de 3-6 meses post-lesión).
- Mantienes fortalecimiento preventivo indefinidamente.
- Evitas sobrecarga repetitiva excesiva.
- Controlas peso corporal.
¿Cuál es el riesgo de re-lesión al volver a jugar al fútbol después de LCA?
- General: hasta un 32% dependiendo de edad (jóvenes tienen más riesgo), sport, y cumplimiento preventivo.
- Futbolistas específicamente: Aproximadamente 8-15% en los primeros 2 años postoperatorio.
- Lesiones contralaterales (LCA de la otra pierna): 3-5%, también significativo.
¿Necesito usar rodillera después de volver?
Probablemente no es necesario, pero algunas evidencias sugieren que una rodillera funcional de compresión (no restrictiva) puede proporcionar beneficio propioceptivo. Lo más importante es tu musculatura, no el neopreno. La rodillera es complemento, no sustituto.
¿Hay diferencia si juego como defensa vs delantero?
Sí, significativa. Los defensores tienen mayor demanda de:
- Cambios de dirección rápidos y repetitivos.
- Transiciones postura estática→movimiento explosivo.
- Movimientos rotacionales complejos.
Esto aumenta el riesgo de re-lesión. Los delanteros típicamente tienen retornos más rápidos porque sus demandas posicionales, aunque explosivas, son más predecibles. Si eres defensa, requiere especial énfasis en:
- Entrenamiento reactivo complejo.
- Transiciones posturales.
- Trabajo específico de gestos defensivos.
¿Puedo volver a jugar al fútbol después de LCA antes de los 9 meses si me siento listo?
No deberías. El injerto continúa madurando biológicamente hasta los 12 meses. A 7-8 meses, muchos futbolistas se sienten «bien», pero su injerto aún está en remodelación. Las re-lesiones en este período son traumáticas.
Insiste en pasar los tests objetivos antes de competir, sin excepciones.
📚 Bibliografía
- RELART – Revista Latinoamericana de Traumatología del Deporte
URL: https://revistarelart.com/ediciones-anteriores/64-volumen-05-numero-1/volumen-17-numero-3/605-retorno-deportivo-en-atletas-de-alto-rendimiento-despues-de-reconstruccion-de-ligamento-cruzado-anterior-de-rodilla
Estudio: Radice et al. (2010) – 212 atletas de alto rendimiento, tasas retorno 94.5% - G-SE (Global Sports Engineering)
URL: https://g-se.com/es/retorno-deportivo-al-mismo-nivel-en-reconstrucciones-del-ligamento-cruzado-anterior-utilidad-de-los-criterios-de-alta-con-seguimiento-de-cinco-anos-2994-sa-g63d99cef8f900
Estudio: Seguimiento 5 años, 6 criterios alta, LSI e isocinesia - Physio-Network – 5 Test de Retorno
URL: https://www.physio-network.com/es/blog/5-pruebas-de-retorno-al-juego-que-no-deben-faltar-tras-la-reconstruccion-del-acl/
Referencia: Criterios salto, fuerza, preparación psicológica - American Journal of Sports Medicine (AJSM)
URL: https://link.springer.com/chapter/10.1007/978-3-030-66321-6_10 - Orthopaedic Journal of Sports Medicine
