La rotura de menisco es una lesión con alta incidencia en población deportista, especialmente en aquellos deportes donde predominan los cambios de dirección y pivotes, así como en población. adulta debido a la degeneración del menisco. Actualmente existen programas de recuperación de lesiones de menisco basados en el ejercicio físico y ejercicios enfocados, pudiendo evitar la operación o reducir considerablemente el tiempo de recuperación. A lo largo del post exponemos un tratamiento conservador (sin cirugía)para la rehabilitación de menisco.

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¿ Qué es el menisco ?

Los meniscos (medial y lateral) son láminas semilunares (forma de “U”) de cartílago que se apoyan en la cara articular de la tibia y absorben las cargas que pasan a través de la rodilla, actuando como amortiguadores y estabilizadores de la rodilla.

Los meniscos no son estructuras exactamente iguales, siendo el medial con forma de “C” y el lateral siendo prácticamente circular. 

Aunque ambos estén conectados a la tibia, no se adhieren, por lo que pueden deslizarse sobre ella en función del movimiento, motivo por el cual pueden ser pellizcados por el cóndilo (pudiendo llegar a arrancarlos de su posición.

¿ Qué es una rotura de menisco ?

Una rotura de menisco ocurre cuando una de estas piezas de cartílago se desgarra. Puede ser el resultado de un giro brusco de la rodilla mientras se soporta peso, un movimiento común en deportes como el fútbol, el baloncesto y el tenis. Además de esto, la hiperflexión o hipertensión de rodilla, así como posiciones bruscas de valgo o varo de rodillas (rodillas orientadas hacia dentro o fuera). Los síntomas típicos incluyen dolor, hinchazón, rigidez y, a menudo, una sensación de bloqueo en la rodilla.

Tipos de Rotura de Menisco

Existen varios tipos de desgarros de menisco, que se clasifican según su forma y ubicación:

1. Desgarro Longitudinal: A lo largo del borde del menisco.
2. Desgarro Radial: Desde el borde exterior hacia el centro del menisco.
3. Desgarro en Asa de cubo: Un tipo de desgarro longitudinal en el que un segmento del menisco se desplaza hacia el centro de la articulación.
4. Desgarro Degenerativo: Común en personas mayores debido al desgaste del cartílago con el tiempo.

Síntomas de una Rotura de Menisco

Los síntomas de una rotura de menisco pueden variar dependiendo de la gravedad del desgarro y pueden incluir:

• Dolor en la rodilla, especialmente al girar o torcer.
• Hinchazón y rigidez, que pueden empeorar en las primeras 24 horas.
• Dificultad para extender completamente la rodilla.
• Sensación de bloqueo o de que la rodilla se traba.
• Sensación de inestabilidad en la rodilla.

Diagnóstico de la Rotura de Menisco

El diagnóstico de una rotura de menisco se realiza mediante un examen físico en el que el médico evalúa los movimientos de la rodilla y los síntomas reportados. Además, se pueden utilizar pruebas de imagen como la resonancia magnética (RMN) para confirmar el desgarro y determinar su ubicación y severidad

Importancia de un Diagnóstico Temprano en Lesiones de Menisco

Un diagnóstico temprano de la rotura de menisco es crucial para un tratamiento eficaz. Ignorar los síntomas puede llevar a un mayor daño en la rodilla y complicaciones a largo plazo. Las técnicas modernas de imagen, como la resonancia magnética, permiten una identificación precisa y rápida de los desgarros, facilitando un tratamiento adecuado.

Tratamiento de la Rotura de Menisco

El tratamiento para una rotura de menisco puede ser conservador o quirúrgico, dependiendo de la gravedad de la lesión.

 Tratamiento Conservador en Lesiones de Menisco

Tras una posible operación o al inicio de la recuperación de menisco tras el diagnóstico, deberemos movilizar la articulación de la rodilla lo antes posible, buscando la máxima flexión y extensión de rodilla con el fin de minimizar la pérdida de movimiento y favorecer el flujo sanguíneo para acelerar la recuperación.

Tras ello, encontramos distintas fases en la rehabilitación de menisco: 

1. Fase de inmovilización: inmovilización relativa de la rodilla, buscando realizar ejercicios de movilidad con el fin de no perder movilidad, bajar la inflamación de la rodilla y apoyar de manera progresiva el peso. También se realizarán ejercicios de fuerza en el resto el cuerpo con el fin de evitar una posible pérdida de la capacidad física.
2. Fase de rehabilitación de menisco: el objetivo es devolver la funcionalidad a la articulación, es decir, recuperar el balance articular perdido  y la masa muscular perdida en el proceso. Al final de esta fase el objetivo es realizar las actividades diarias  sin dolor o con un dolor mínimo.
3. Fase de aproximación: en esta fase específica se buscará eliminar por completo el dolor,  tener una funcionalidad completa, trabajar la estabilidad articular, trabajo propioceptivo y reducir las posibles asimetrías entre miembros. El trabajo de fuerza específico en esta fase es fundamental para avanzar en nuestra recuperación de menisco.
4. Fase de orientación: se incrementará la intensidad en desplazamientos, iniciando cambios de dirección y ritmo, manteniendo un trabajo de fuerza con el fin de seguir mejorando y evitar nuevas recaídas. Además de esto se iniciará la fase reeducativa orientada a los distintos deportes en función de la persona y sus objetivo.

Es importante destacar que estas indicaciones generales no son individualizadas y cada persona necesita un tratamiento distinto y adaptado a sus características y objetivos. Recuerda que puedes solicitar tu evaluación gratuita y sin compromiso para saber como se abordaría tu situación particular.

Tratamiento Quirúrgico en Lesiones de Menisco

En casos donde el tratamiento conservador no es efectivo, puede ser necesario recurrir a la cirugía. Los procedimientos quirúrgicos más comunes son:

• Artroscopia de Rodilla: Una cirugía mínimamente invasiva que permite reparar o remover el tejido meniscal dañado.
• Sutura de Menisco: Recomendado para desgarros en áreas del menisco con buen suministro de sangre.
• Meniscectomía Parcial: Remoción del tejido meniscal desgarrado.

Recuperación y Rehabilitación tras la Rotura de Menisco

La recuperación de menisco tras la cirugía varía según el tipo de tratamiento y la condición física del paciente. La rehabilitación es fundamental y puede incluir programas de ejercicios para fortalecer los músculos alrededor de la rodilla y recuperar la movilidad. Es crucial seguir las indicaciones del médico y del readaptador deportivo para asegurar una recuperación completa.

Prevención de la Rotura de Menisco

Para prevenir la rotura de menisco, se recomienda:

• Mantener un peso saludable para reducir la carga sobre las rodillas.
• Realizar ejercicios de fortalecimiento y estiramiento regularmente.
• Utilizar calzado adecuado para actividades deportivas.
• Evitar movimientos bruscos y giros repentinos que puedan poner en riesgo las rodillas.

Complicaciones de una Rotura de Menisco

Una rotura de menisco no tratada adecuadamente puede llevar a complicaciones, como la artrosis de rodilla, debido al desgaste anormal del cartílago. Además, la inestabilidad y el dolor persistente pueden afectar la calidad de vida y la capacidad para realizar actividades diarias.

Caso de Estudio: Rotura de Menisco en Atletas

Los atletas son particularmente susceptibles a las roturas de menisco debido a la naturaleza de sus actividades. Deportistas en fútbol, baloncesto y deportes de contacto enfrentan un riesgo mayor debido a los giros y pivotes rápidos. Un ejemplo notable es el caso de un famoso futbolista que sufrió una rotura de menisco durante un partido, requiriendo cirugía y meses de rehabilitación antes de regresar al campo.

Rotura de Menisco en Adultos Mayores

En los adultos mayores, las roturas de menisco pueden ocurrir debido a cambios degenerativos en las rodillas cuando no se ha realizado entrenamiento de fuerza como herramienta preventiva a los largo de los años.. Con el tiempo, el cartílago puede debilitarse y volverse más susceptible a desgarros con movimientos cotidianos, como arrodillarse o ponerse en cuclillas. La artrosis puede exacerbar esta condición, haciendo necesario un tratamiento más agresivo

Conclusión sobre la recuperación de menisco 

La rotura de menisco es una lesión de rodilla común que puede afectar significativamente la función de la rodilla y la calidad de vida. Es esencial reconocer los síntomas y buscar atención necesaria para recibir el tratamiento adecuado. Con un manejo apropiado y un programa de ejercicios adaptado, muchas personas pueden volver a sus actividades normales y deportivas sin complicaciones a largo plazo.

Si necesitas más información no dudes en pedir tu evaluación gratuita y sin compromiso para saber como se abordaría tu situación concreta o visita la sección sobre el tratamiento de lesiones de rodilla.

Si tienes cualquier pregunta referente a como se abordaría tu caso concreto, la metodología Fare con te en el servicio de recuperación de rodilla o sobre que plan de rehabilitación es el mejor para ti, no dudes en transmitir tu duda y tener toda la información antes de tomar tu decisión.

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